TRINIDAD

Al was here: marzo de 2017
Número de días: 1 y dos noches
Mi puntuación: 4/5

Cuando empecé a organizar mi viaje a Cuba, después de buscar en webs de viajes, blogs, guías, etc, llegué a dos conclusiones: que lo más interesante era la mitad oriental de la isla, y que en cuanto a la arquitectura de los pueblos más famosos de la zona (Trinidad, Cienfuegos, Sancti Spíritus y Santa Clara) todos me resultaban muy parecidos, así que hice lo que habitualmente me hacen a mí, preguntar a los amiguetes que habían estado, en particular a mis amigos los Manolos Jiménez; el primero había ido dos veces hacía años, y el segundo acababa de volver de Cuba hacía unos meses, siendo de hecho la persona que nos animó a ir. Ambos dijeron lo mismo, visto uno vistos todos, si tenéis que elegir, el mejor es Trinidad. Dicho esto no fuimos a Sancti Spíritus ni Santa Clara, y apenas estuvimos de paso en Cienfuegos, por lo que no puedo hacer juicios de valor sobre ellos, pero Trinidad mereció totalmente la pena.

Al principio uno llega pensando “no va a ser para tanto, será igual que cualquier pueblo de Centroamérica” pero no es así. El centro histórico es precioso, el conjunto de edificios pintados de colores resulta muy atractivo, está recién restaurado (gracias a la mejora en la economía cubana), es agradable para ver, pasear, comer o tomar algo en cualquier local, y lo mejor está por llegar, ya que la restauración avanza sin cesar en este pueblecito que acabará siendo por completo tan llamativo como lo es el centro en el momento actual.

Para los que en un día le hayan dado varias vueltas, cerca hay una gran cantidad de posibilidades: Playa Ancón está considerada una de las mejores playas de la costa sur (cayos aparte) y el Parque Nacional Topes de Collantes es tan bonito y tiene tantos recorridos que para apreciarlo adecuadamente se necesitarían varios días.