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Actualizado el 25 de Febrero de 2019

Para la mayoría de personas, este nombre solo evoca dos palabras: bomba y guerra. No les falta razón, pero esta región es mucho más que eso, es un lugar al que todo el mundo debería ir:

• Su capital, Hiroshima, ha pasado a la historia con el triste honor de ser la primera y hasta la fecha penúltima ciudad donde se ha utilizado la bomba atómica, y hay que visitarla para, tal y como dicen allí, conocer la historia y no repetirla. Un viaje debería ser algo más que hacer fotos; es un destino muy impactante y fundamental. Es el primer sitio que visité dedicado a explicar la barbarie de la que es capaz la especie humana, y por tanto es uno de los que más me impresionó.
• La cercana isla de Miyajima también debe visitarse, porque es uno de los destinos más bonitos y encantadores de Japón. La armonía de los templos con la naturaleza de la isla es simplemente poético y encantador. Lo repetiría mil veces.
• Onomichi, al este de la prefectura, es el lugar de inicio del Shimanami Kaido, una de las rutas en bicicleta más famosas del país, que discurre durante más de 70 kilómetros sobre enormes puentes (uno de ellos el puente colgante más largo del mundo, de casi 5 kilómetros) que conectan islas del Mar de Seto.

Dedicarle unos días en la apretada agenda de casi todos los visitantes a una región tan alejada del eje Tokio–Kioto es algo que pocos apenas se plantean, y de lo cual muchos se arrepentirían si verdaderamente conocieran lo que se pierden. Ya sea por motivos históricos, paisajísticos o de originalidad, y en parte muy a su pesar, esta región es única.

DESTINOS

• HIROSHIMA CIUDAD
• MIYAJIMA
• SHIMANAMI KAIDO

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